Para la labor de limpiar la parrilla, encender el fuego, acomodar las brasas y manipular la carne (en nuestro caso la tira de asado) y trocearlas, debemos valernos de varios utensilios.
Un cuchillo. Uno grande y afilado, los conocidos como “de cocinero” es imprescindible. De una hoja de alrededor de 20 centímetros de hoja y tres a cuatro de ancho.
Leer sobre su afilado en capítulo aparte.
Un tenedor (trinchador). Esta bueno aquel de dientes largos, que facilita mover la carne, de unos 30 centímetros. Atención “no es para pinchar la carne”, sabemos que hay que evitar pincharlas para que no se desprendan los jugos, es para levantar y sujetar las tiras de asado.
Las pinzas metálicas largas. Cuando ya esté en plena acción este utensilio le facilitará poder dar la vuelta a las piezas de carne. Incluso para recoger aquello que “en un descuido”, se cae al fondo de la parrilla.
Una tabla para apoyar y cortar la tira de asado. Algo simple, pero muy necesario y que le facilitará todo el proceso es una tabla donde cortar cada una de las costillas de la tira. Tabla de una buena dimensión, que vienen de madera dura.
Es preferible que tenga canaleta en todo su alrededor, para evitar que los jugos se caigan en los alrededores al cortar la carne ya asada. Es recomendable y práctico contar con dos tablas.
Pinzas. Ayudaran a servir los trozos de tira de asado
Cepillo metálico. Ayudará en la limpieza de la parrilla.
Espátulas. Recomendadas en todos los tamaños, le ayudarán a mover o trasladar las carnes.
Atizador para la brasa. Vara de metal, de suficiente largo, adaptada para “trabajar” las brazas.
Varilla de madera. Nunca está demás. Un simple “palo” largo. Ayudarán a mover y acomodar la braza en sectores alejados de la parrilla y en reemplazo del atizador.
Escoba. ¿escoba? ¿para que?. Mantener el piso del sector “limpio” es necesario. Carbonilla que se cae, cenizas, algo de grasa …. Atención, si es de hilos de plástico, cuidado si tenemos que barrer carbonilla encendida, con lo que se recomienda la clásica de “espigas”.
Lámpara portátil. Imprescindible si es asado nocturno y aunque la parrilla que se utilice tengo luz propia. Es que normalmente es de poca nitidez la existente, ya sea porque su vidrio protector la opaca, o porque esta algo cubierta por la grasa, o por su posición.
Contar con una lámpara portátil permitirá apreciar con mayor seguridad como se viene “asando” el “asado de tira”.
Una lámpara con brazo extensible para seguir con buena iluminación el desarrollo de la cocción de las carnes y su manejo. Se aplica más arriba de nuestros ojos y delante de ellos.
La caja de fósforos. No merece comentario adicional, verdad?
Repasadores. Durante la preparación del fuego y la cocción, reiteradamente debemos recurrir al lavado de las manos. Habrá quien diga que eso “es indicio de no un buen asador” … pero me parece que no es relevante. Ese es uno entonces de los repasadores a utilizar.
Pero será necesario usar otro, ya cuando se retira la carne del asador y se pasa a su troceo. Es que el anterior, obviamente, se ha impregnado de suciedad.
Leñitas. Se trata de las “maderitas” necesarias para iniciar el fuego. Aquellas que por comodidad las compramos en el supermercado o las obtenemos del clásico cajón de fruta que le pedimos al verdulero o estamos atentos de “levantarlo” en su vereda, antes que pase el recolector de la basura.
Trozos de grasa. Será necesaria para pasarle a la parrilla antes de iniciar la cocción. Debemos recordar de pedirla al carnicero, cuando compramos la carne.
Jarro. Jarro con agua. ¿jarro? ¿con agua, para que?. Y si, digamos por las dudas. Mas vale prevenir que curar.
No sea que en un descuido se desprendan llamas importantes de la braza y para su rápida eliminación debamos eliminarlas echándoles agua.
Entonces mantengamos un tacho con agua próximo a la parrilla, porque el goteo de la grasa derretida a veces enciende llamaradas que se extinguen fácilmente salpicándole agua.
Más práctico resultará contar con agua a través de un rociador
Papel de diario. Será necesario tanto para limpiar la parrilla como para usar en las distintas maneras en que se decida prender el fuego.
Bandejas. Las de acero inoxidable. Con ellas acercaremos los trozos de tira de asado a la mesa. Serán necesarias varias.
Brasero de mesa. Es una opción. Es que tratándose de un asado familiar el asador se enorgullece de su continua gestión de la parrilla y servir al mismo tiempo, bandejas mediante. Por otra parte es frecuente que la parrilla se encuentre cerca de la mesa.
However, it’s nice to have one on hand for small gatherings to give the asador a chance to be part of the fun instead of sweating away at the grill.Sin embargo, es bueno tener un “bracero de mesa” a mano para que el asador tenga también la oportunidad de ser parte en mayor tiempo de la diversión, en lugar de sudor lejos de la parrilla.
Pala. Necesaria para “transportar” la brasa.
Trapos “viejos”. Serán necesarios para limpiar la parrilla.
Recipiente para la basura. Es conveniente tenerlo cerca.
Secador de pelo. Ya nos enteraremos de su posible uso mas adelante.
Hay otros utensilios que no he mencionado, pero rescato el del “limpiador de parrilla”, con punta en forma de ángulo, como se apreciara en la siguiente vista fotográfica: